MESA DE TRABAJO: COMERCIO EXTERIOR
Resumen de la reunión y principales temas abordados
FECHA Y LUGAR
19 de agosto de 2022
Fundación Argentina Porvenir
EXPOSITORES
Federico Lavopa, director of International Trade en Quipu.
Linda Aidar, especialista en Comercio Exterior.
Gustavo Lunazzi, director de Solución de Controversias Internacionales en Secretaría de Relaciones Económicas Internacionales.
Mauricio Caucino, ex embajador Argentino en Israel.
OBJETIVO DEL ENCUENTRO
Trabajar en conjunto temas relacionados a las principales trabas que hoy en día se enfrentan en el área de comercio exterior y las dificultades para la exportación e importación de productos en Argentina.
CONTEXTO GENERAL
Dónde estamos: nos encontramos frente a nuevas variables a nivel internacional que modifican las dinámicas del comercio internacional y hacen necesario que pensemos una nueva estrategia comercial. El primer antecedente de esto fue la guerra comercial entre EEUU y China, seguido por la firma del RCEP, la pandemia y la guerra en Ucrania. A su vez, crece cada vez más el rol de China a nivel global y las instituciones internacionales, como la OMC, están perdiendo poder en el ámbito internacional. Finalmente, aparece la digitalización y el consumo de servicios relacionado a este mercado.
Argentina - exportaciones: el país tiene un escaso incremento en el nivel de exportaciones, complementado por una balanza de pagos desfavorable y un tipo de cambio desdoblado que no ayuda al exportador. Tenemos una condición irreversible, el hecho de que nuestra ubicación geográfica está lejos de los principales polos de consumo. Esto sumado a altos costos de transporte (en junio de 2022 el costo del flete aumentó 41,8% respecto del mismo mes del año anterior). Si bien se puede observar un aumento del 31,4% en el intercambio comercial (sumando exportaciones e importaciones) este aumento se debe principalmente al aumento de precios, y no al aumento en cantidades.
Argentina - importaciones: hoy tenemos dos principales problemas a las importaciones. Por un lado, el uso de licencias no automáticas como práctica generalizada (algo no avalado por la OMC) y por otro el uso del Coeficiente Económico Financiero, lo cual le pide al importador / exportador que presente sus proyecciones para determinar un cupo máximo para su actividad.
PRINCIPALES TEMAS
Licencias no automáticas
La aplicación de licencias no automáticas generó problemas ante la OMC, cuando se estableció que pedir una licencia no automática (en su momento DJAI) no formaba parte de los acuerdos multilaterales de comercio. Con la gestión de Mauricio Macri, se eliminaron las DJAI y se estableció el sistema de licencias. Con esto, ahora se generó un sector que vive de estas licencias y que se vería perjudicado por su eliminación. No se podría retroceder de manera simple.
Podríamos decir que el problema no son las licencias de exportación, sino que es el uso generalizado de las licencias no automáticas. En su origen, están pensadas para, por ejemplo, administrar una restricción de exportación o importación de mercaderías peligrosas (químicos, armas, etc.). Es un mecanismo administrativo cuando ya tenés una norma subyacente y tiene excepciones muy restringidas. Pero, hoy en día, cualquier cosa pasó a tener licencia no automática. Esta situación no se modificó desde 2015, si bien la administración anterior presentó un plan para ir bajando gradualmente el uso de licencias no automáticas. Es importante pensar una política en este sentido, que tenga un descenso gradual. Esto es una oportunidad. Porque si tenemos una decisión política de sacar las LNA, tenemos una herramienta para sentarnos con el sector afectado.
La relación con socios comerciales
Pensando en nuestro contexto respecto a la estrategia defensiva de otros países de nuestros productos, por ejemplo, hoy para los mercados en EEUU estamos exportando 4921 millones. La cantidad de exportaciones argentinas por medidas anti dumping, anti subsidios, etc. es de 2253 millones. Si EEUU decidiera levantar todas esas medidas (ilegales), automáticamente exportaríamos ⅓ más de lo que exportamos hoy a EEUU.
Una de las principales dificultades que se enfrentan en organismos multilaterales o negociaciones con otros países es la discusión en torno a ítems de los acuerdos relacionados con “establecer un diferencial de derechos de exportación que sirven para fomentar una cierta industria nacional”. Esto complica las relaciones comerciales con otros países y evita que se concreten acuerdos.
Sistemas multilaterales
Este es un tema a observar pensando en los tratados multilaterales que proscriben estas prácticas. Hay que tener en cuenta que son tratados de la nación y tienen un rango superior a las leyes internas.
Hoy no funciona el sistema de litigio de la OMC. Por lo que este problema y otros van a quedar en un limbo. Cuando se va a juicio entre dos países en el sistema de litigio de la OMC, autoriza al país ganador a retaliar al Estado que esté violando las normas del comercio internacional. Sin embargo, esta autorización es ficticia cuando el litigio es entre un Estado pequeño (incapaz de retaliar) y uno poderoso. El riesgo para un Estado como Argentina es retaliatorio. Alguno de los demandantes te aumenta 100% el arancel en alguna lista de productos que uno exporta. A su vez, el estado podría tener que pagar por los perjuicios. Por otro lado, un demandante está autorizado a prescribir por muchos años y puede no hacerlo.
Un país, para dar credibilidad y establecer una política a largo plazo se adhiere a acuerdos internacionales de comercio. Estos delinean un camino, en cierto sentido atan al Estado a cumplirlo.
Política comercial ”poco sofisticada”
El problema, más allá de la cantidad de medidas legales que tenemos, es la calidad de medidas que se siguen implementando sin un trasfondo que analice los costos que se puedan tener. No tenemos sofisticación en nuestra política comercial.
La administración de comercio fracasó rotundamente. Argentina bajó su participación en el comercio internacional de 3% hace 50 años a 0.3% hoy. Hace 40 años éramos el 1%. En el mundo, también tenemos un nuevo crecimiento de Asia, de China, que modifica la participación de todos los países.
Para una sofisticación de la política comercial es necesario pensar cuál va a ser la lista de temas que va a tener la futura persona a cargo de su diseño en su escritorio. Las LNA, por ejemplo, es uno de estos temas. Hay que tener en claro determinadas decisiones y en función de ello diseñar la política comercial.
La ausencia total de una política de inserción comercial por una cuestión de fragilidad se suma a que solemos sobreestimar los efectos de dejar de lado algunas cosas que vienen por inercia. Estamos tomando medidas cautelares cuando en realidad no tenemos un diagnóstico claro de qué tan frágil estamos.
Competencias de política comercial
Una pregunta que definiría nuestra política comercial es: ¿Argentina tiene que tener la Secretaría de Comercio en Cancillería, Ministerio de Economía o debería ser un ministerio separado? Hoy la Comisión Nacional de Comercio Exterior se encuentra dentro del Ministerio de Desarrollo Productivo. Cuando se debatió esto a principios del siglo XXI, en el mundo parecía que la región se inclinaba por un Ministerio de Comercio independiente. Pero Argentina tiene grandes debilidades. La política comercial como parte de la política exterior funciona cuando se le asigna la responsabilidad a alguien para que acomode todo, cae en personalismos.
Hay una gran presión en la Cancillería por recuperar la competencia comercial. Sin embargo, es necesario pensar todo desde el inicio. Argentina nunca tuvo una política comercial como tal. Siempre está condicionada a la política fiscal, a otros objetivos de política exterior. Hay veces que se pierde un mercado sin pensar las consecuencias. No funciona el instrumento. Hay un problema de cultura exportadora y necesidades didácticas. Desconocen totalmente en el sector privado y público.
OTROS TEMAS EN AGENDA. IDEAS A FUTURO
Bienes de capital: Es necesario pensar un cambio en el régimen de bienes de capital y el uso del CEF en esta área. Esta es una herramienta que nació para divisas, pero también estaría afectando de manera indirecta al bien porque afecta tu licencia de exportación.
Pensar cómo comprometer al Estado a compromisos de largo plazo: por ejemplo, el acuerdo UE - Mercosur, en el que los Estados se anclan institucionalmente en un paquete de reglas.
La zona franca no funciona: si fueran productivas, las empresas sí no pagarían ahí varios impuestos. Una empresa que importe tiene que pagar 21 iva, 20 iva adicional, iibb. Si las empresas productivas estuviesen dentro de la zona franca las cargas impositivas estarían subvencionadas.